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Detuvieron a Fabián Tablado, femicida de Carolina Aló, por violar la perimetral

En febrero de este año recibió la libertad tras el crimen realizado en 1996 y esta tarde regresó al penal por el delito de "desobediencia" al pasar a una cuadra y media del trabajó de Edgardo Aló.

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Apartir de las cámaras de seguridad de la Municipalidad de Tigre, la justicia detectó que Fabián Tablado violaba la perimetral impuesta por la familia de Carolina Aló,luego del brutal crimen dde 1996, cuando la asesinó de 113 puñaladas y por la que recibió su libertad en el pasado mes de febrero.

El femicida tenía prohibido acercarse a menos de 500 metros de la familia de su víctima y por esta situación será interrogado. Según se vio en las imágenes, aminaba con sus hijas a una cuadra y media del trabajo de Edgardo Aló, padre de la vítcima, y el fiscla Sebastián Fitipaldi pidió su detención por el delito de “desobediencia”

“Hace 24 años prometí en la tumba de mi hija que iba a ser la sombra de este chacal y lo estoy cumpliendo. Con el dolor que significó para mi verlo salir en febrero del penal, ahora espero que vuelva a la cárcel por mucho tiempo”, expresó Aló en declaraciones a diferentes medios.

En el pasado mes de febrero, cuando le dieron la libertad, Tablado le pidió “perdón a todas las mujeres” y declaró que “era consciente” del delito. Ahora, quedó alojado en la comisaría 1ra de Tigre pero estaba previsto que sea indagado en la Fiscalía de Violencia de Género de Tigre por el fiscal Diego Callegari,.

No es la única perimetral con la que cuenta Tablado. Por otra causa, se le prohíbe acercarse a menos de 300 metros a Roxana, su ex mujer, con la que se casó mientras estaba en la cárcel en 2007 y la amenazó de muerte cuándo se separaron en 2013. Edgardo Aló declaró años atrás que otras ex novias también sufrieron episodios violentos y que existen cartas donde el asesino asegura “que le gustaría volver a pasar por esa experiencia de matar”.

Por su lado, Tablado justificó su coartada y destacó en una entrevista que brindó el lunes que no conocía cuál era el domicilio laboral de Aló y que no era su intención “buscar problemas”. “Tengo todas las notificaciones enviadas por el Juzgado 2 de Familia donde especifica la dirección del señor Edgardo Aló pero no me dice dónde es la dirección laboral de él”, explicó.

“Yo vivo a tres cuadras del puente y el señor Aló trabaja a 150 metros del puente. No fue una intención mala mía ni de buscar problemas”, sentenció el femicida. Aún así, la violación de la perimetral quedó vigente y podría volver a prisión, pese a que tiempo atrás fue beneficiado con el polémico 2×1 tras haber pasado tiempo en prisión sin condena firme.

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