Tucumán: Una mujer roció con gas pimienta a otra porque le habría chocado el auto
La víctima terminó con lesiones y quemaduras en su rostro, brazos, pecho e irritación en los ojos. Tras radicar la denuncia aseguró que "alguien así no puede andar suelta por la calle"
Una mujer debió ser hospitalizada luego de ser agredida por otra que la persiguió durante varias cuadras, la insultó y la roció con gas pimienta. La discusión se desencadenó a partir de un incidente de tránsito menor por el cual la víctima le habría tocado el espejo del automovíl con su motocicleta a la agresora.
El episodio ocucrrió durante la tarde del sábado en el centro de la capital de Tucumán. La mujer agredida, identificada como Johana Loto, de 33 años, terminó con lesiones y quemaduras en su rostro, brazos, pecho e irritación en los ojos.
Loto relató que todo comenzó cuando ella circulaba a bordo de su moto por la calle Ayacucho y, como el tráfico estaba detenido antes llegar al semáforo de Crisóstomo Álvarez, acomodó el espejo de su vehículo para pasar por al lado de un Peugeot 308.
“Me dirigía en moto y doblo hacia Crisóstomo Álvarez. Cuando llego a Crisóstomo y Chacabuco, una mujer comienza a increparme, a insultarme por primera vez, diciendo que con mi espejo había tocado el retrovisor de su auto”, recordó la víctima del ataque.
Loto negó haberle tocado el espejo y afirmó que si hubiese sido así “le hubiera pedido disculpas, a pesar de que estaba perfecto su retrovisor”. Sin embargo, la automovilista la siguió por siete cuadras y, cuando logró ponerse a la par de la moto, la insultó y la amenazó de muerte.
Posteriormente, intentó chocarla: “Me tiró el auto impidiendo mi paso. Mientras, en su mano tenía preparado el gas pimienta”. Otras personas que se encontraban en la zona la asistieron rápidamente, pero como la ambulancia demoró en llegar, uno de ellos la subió a su camioneta y la trasladó al hospital Padilla.
Al llegar al centro asistencial le lavaron las zonas irritadas, le colocaron inyectables, suero y crema para quemaduras. Tras recibir el alta, se dirigió a hacer la denuncia en la comisaría primera y afirmó que tanto la mujer como el vehículo ya fueron identificados.
Tras el ataque la mujer radicó la denuncia y afirmó que “alguien así no puede andar suelta por la calle”. “Necesito que me cuiden porque es una persona violenta”, remarcó la Loto
