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Los techos verdes: más que una tendencia estética, una fuente de beneficios sustanciales

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Los techos verdes son una tendencia en constante crecimiento en varias partes del mundo porque embellecen el paisaje urbano. Sin embargo, los techos verdes ofrecen una gama de beneficios mucho más extensa. Desde mejorar la calidad del aire hasta bajar los niveles de estrés, pasando por la reducción del consumo de energía para climatizar el hogar. Tiene sentido entender de qué se trata eso a lo que se le llama “techo vivo”.

¿Qué son los techos verdes?

Un techo verde es un sistema de cubierta que incorpora vegetación y plantas en la parte superior de los edificios. Por lo general, está compuesto por tres capas: una impermeable, otra de drenaje y la tercera de sustrato, donde crece la vegetación. Los techos verdes varían desde los más extensivos hasta los más intensivos.

En el tipo extensivo, la capa de vegetación es delgada y está compuesta por hierbas, musgos, suculentas y plantas de bajo mantenimiento. Es más liviano, fácil de instalar y requiere poco mantenimiento. Por lo general, no se utiliza como espacio verde para descanso o recreación.

En el tipo intensivo, la cobertura vegetal es más espesa y puede incluir árboles y arbustos, e incluso espacios de descanso y recreación para personas. El sustrato debe ser más grueso, lo que requiere que el techo pueda resistir más peso. Este tipo de techo verde ofrece una mayor variedad de usos y beneficios.

Beneficios que ofrece el techo verde

Los beneficios de los techos verdes son múltiples y abarcan varias dimensiones.

  1. Mejora la calidad del aire: La vegetación de los techos verdes filtra y purifica el aire al absorber dióxido de carbono, el principal gas responsable del cambio climático. Además, libera oxígeno y retiene material particulado (PM) y otros contaminantes atmosféricos, como ozono, dióxido nitroso y de azufre. Un aire más puro implica menos problemas respiratorios, desde alergias hasta asma y otras enfermedades crónicas.
  2. Reduce la contaminación acústica: Los techos verdes actúan como una superficie aislante natural de los sonidos exteriores. La vegetación, incluso solo el césped, combinada con el sustrato donde crece, absorbe las ondas sonoras en mayor medida que una superficie dura. De esta manera, se reduce la contaminación sonora que ingresa a los hogares y las oficinas. Un interior más silencioso reduce los niveles de estrés y aumenta la concentración de las personas, ya sea que estén trabajando o estudiando.
  3. Mitiga el efecto isla de calor urbano: Los techos verdes, al igual que los espacios verdes en general, ayudan a reducir la temperatura ambiental en áreas urbanas y mitigar el efecto isla de calor urbana. Estudios han demostrado que los techos verdes pueden disminuir la temperatura exterior hasta en 10 grados durante olas de calor de verano. Esto no solo beneficia la salud de los peatones al reducir el riesgo de golpes de calor, sino que también mejora el bienestar climático de los habitantes de los edificios al generar ambientes más frescos en verano y más cálidos en invierno, sin la necesidad de utilizar en exceso equipos de climatización y, por ende, reducir las emisiones de gases responsables del cambio climático.
  4. Beneficios para la salud mental: Estar expuestos a áreas verdes y naturales ha demostrado tener efectos positivos en la reducción del estrés y la mejora del bienestar mental. Aunque no todos los techos verdes son accesibles para el descanso o la recreación, cualquier cobertura verde es mejor que un techo gris. Estudios han demostrado que incluso solo la vista de un techo verde durante 40 segundos durante el recreo puede mejorar los resultados en las tareas y reducir los niveles de estrés en comparación con la vista de un techo de hormigón. Además, los techos verdes funcionan como refugio para plantas y animales, promoviendo la interacción con la naturaleza y mejorando el bienestar psicológico.
  5. Agricultura urbana: Los techos verdes pueden proporcionar espacios para cultivar verduras, hierbas y frutos, lo que promueve la disponibilidad de alimentos saludables. Además, la horticultura también tiene beneficios para la salud física y mental. Otra función ambiental destacada es la capacidad de reducir el riesgo de inundaciones al absorber y retener parte del agua de lluvia, lo que ayuda a mitigar el impacto de las inundaciones en las ciudades y a filtrar el agua antes de que llegue a los cuerpos de agua, protegiendo así la vida acuática.

Techo verde sustentable

Para que un techo verde sea sustentable, es importante optar por especies autóctonas, ya que requieren menos mantenimiento y son más resistentes a las variaciones climáticas del lugar, además de contribuir a la recuperación de la biodiversidad. También es necesario elegir un sistema de riego eficiente y un sustrato de calidad que facilite el crecimiento de la vegetación y tenga una buena retención de agua.

En resumen, los techos verdes representan mucho más que una tendencia estética en el paisaje urbano. Ofrecen una amplia gama de beneficios, desde mejorar la calidad del aire y reducir la contaminación acústica, hasta mitigar el efecto isla de calor urbano y promover la salud mental. Además, permiten la agricultura urbana y contribuyen a la sustentabilidad ambiental. Estos techos vivos transforman las ciudades grises en oasis de vida y bienestar.

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