La FIFA emitió una declaración contundente sobre el “Caso Rubiales” y concluyó que las acciones de Luis Rubiales “dañaron considerablemente la integridad y la reputación del fútbol”. En particular, se refiere a un incidente en la final del Mundial femenino 2024, donde Rubiales, ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), besó en la boca a la jugadora Jenni Hermoso sin su consentimiento durante la entrega de medallas a las campeonas españolas.
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El informe, que respalda la suspensión de 90 días impuesta a Rubiales por el Comité de Disciplina de la FIFA, fue publicado por el diario El Mundo. La FIFA expresó su pesar por el hecho de que Rubiales “claramente empañó el éxito” del equipo español y del propio torneo, causando un daño a nivel global. La FIFA condena tanto el beso no consensuado como otros gestos inapropiados de Rubiales, como tocarse los genitales en el palco de autoridades durante la celebración de un gol.
Además, la FIFA critica la presión ejercida por Rubiales sobre la jugadora y su entorno para que declararan a su favor después de que estallara el escándalo, calificando esta conducta como “intolerable”. La FIFA enfatiza la importancia de que Rubiales no pueda ejercer su “posición predominante como presidente” sobre Hermoso y otras jugadoras, así como sobre el personal de la RFEF, dada su conducta durante el escándalo.
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