Marcha contra la violencia de género en Argentina: mariposas de protesta en la Plaza de los Dos Congresos

El pasado 25 de noviembre, espacios públicos y plazas de Argentina, al igual que miles de ciudades alrededor del mundo, se convirtieron en escenarios vibrantes de movilizaciones para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Esta fecha, marcada por el trágico asesinato de las hermanas Mirabal en 1960 en República Dominicana, se erige como un recordatorio de la lucha continua contra la violencia machista y los femicidios.

La Plaza de los Dos Congresos en la Ciudad de Buenos Aires fue testigo de la marcha central y más masiva del país. Un mar de mariposas violetas y fotografías de mujeres víctimas de la violencia machista adornaron el espacio, acompañados por pancartas que exigían justicia por los femicidios. La movilización no fue exclusiva de la capital, sino que se replicó en todas las provincias, tejiendo un manto de solidaridad y conciencia en todo el país.

Sin embargo, esta edición de la marcha fue particularmente significativa, ya que tuvo lugar apenas una semana antes del ballotage. Organizaciones sociales, políticas y sindicales aprovecharon la ocasión para sumar sus voces en contra del gobierno electo, liderado por Javier Milei. Las preocupaciones se centraron en los anuncios que indicaban posibles retrocesos en los derechos conquistados, como la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y el cierre del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad.

Los números revelados hasta el 15 de noviembre de este año por el Observatorio de Femicidios de la Defensoría del Pueblo de la Nación arrojaron cifras alarmantes. Se registraron 282 femicidios, incluyendo 4 personas trans, 7 suicidios feminicidas y 24 casos de muertes violentas de mujeres en el contexto de narcotráfico y crimen organizado. Este observatorio, pionero en Argentina, destaca la importancia de visibilizar los suicidios feminicidas, subrayando que estos trágicos eventos se desencadenan como consecuencia de los abusos sistemáticos y la violencia de género sufrida por las mujeres. En este día de conmemoración y protesta, la sociedad argentina alza la voz en un coro unificado contra la violencia de género, exigiendo un cambio y justicia para las víctimas.