Babasónicos: la noche épica en el Campo de Polo que marcó un hito en su carrera
En una velada inolvidable en el Campo de Polo, Adrián Dárgelos, el enigmático frontman de Babasónicos, rompió con su usual reserva para revelar una perspectiva diferente. Frente a una multitud de 55 mil seguidores, sus palabras resonaron proféticas: “Alguna noche de estas nos van a venir a buscar y vamos a haber salido de la trinchera, porque lo que sigue es cuerpo a cuerpo.”
Aunque Dárgelos no es reconocido por extensas interacciones verbales, esa noche fue la excepción. La conexión con la audiencia trascendió las habituales expresiones a través de la música, bailes y letras. Quienes han tenido el privilegio de presenciar a Babasónicos en diversas ocasiones reconocen la singularidad de este evento.
La alegría y disfrute del artista se desbordaron en una manifestación explícita de la noche. Un recorrido de 30 años de éxitos se desplegó en un espectáculo que afirmó su lugar único en el rock nacional. Babasónicos, siendo inigualables en su género, se erigió como una entidad musical propia. El escenario, transformado en un triángulo pinkfloydezco, sumergió a todo el campo en una experiencia psicodélica de efectos y luces, gracias al destacado diseño de luces de Sergio Lacroix.
En sintonía con sus recientes lanzamientos, Trinchera y Trinchera Avanzada, el espectáculo inició con “Anubis” y se extendió durante casi dos horas, abarcando la mayoría de los temas del álbum. Éxitos como “La izquierda de la noche”, “Mimos son mimos” y “Bye Bye” impulsaron el frenesí popular. El tono celebratorio se mantuvo constante, respaldado por versiones desenfrenadas de clásicos como “Microdancing” o “Deléctrico”.
Babasónicos, como los faunos y caballos de su imaginería, demostró ser un grupo con tracción a sangre, capaz de mantener un espectáculo sin pausas, encadenando éxitos como “Los calientes”, “El colmo”, “Pendejo”, “Irresponsables” o “La Lanza”. El contacto cercano con el público, evidenciado en la participación de Adrián en “La Lanza”, consolidó la conexión única de la banda.
Con un agradecimiento especial a Popart por años compartidos, la banda culminó la noche con sonrisas y satisfacción, cerrando el recital más convocante de su carrera entre aplausos. Babasónicos demostró ser maestro tanto en lo clásico como en la vanguardia, confirmando su dominio en la escena musical con una actuación que quedará grabada en la memoria de los fans.
