La distribución de fondos para sueldos de docentes: una posible coalición opositora y una preocupación gubernamental
El inicio del ciclo lectivo 2024 se encuentra en una incertidumbre creciente debido al conflicto en torno al Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID) y a la paritaria nacional del sector educativo. Esta situación podría llevar a una inesperada coalición entre la oposición dura y los sectores dialoguistas en contra del oficialismo, marcando un hito político para el Gobierno.
Recientemente, diversos legisladores han presentado proyectos para sostener el Fondo Nacional de Incentivo Docente, cuya eliminación fue anunciada por Javier Milei. Entre ellos se encuentran la diputada del GEN Margarita Stolbizer, Romina del Pla del FIT, el radical Julio Cobos, y los peronistas Ariel Rauschenberger y Máximo Kirchner. Aunque sus propuestas difieren en detalles, todas coinciden en la necesidad de prorrogar el giro de fondos destinados a otorgar un extra salarial a los profesionales de la educación.
Las diferencias principales entre los proyectos radican en el período de prórroga. Mientras que Cobos y Rauschenberger proponen una extensión de cinco años, Stolbizer sugiere que la prórroga se mantenga hasta la sanción de una nueva Ley de Coparticipación Federal o la firma de un nuevo Pacto Fiscal. Por otro lado, Máximo Kirchner y el Frente de Izquierda abogan por convertir el fondo en permanente.
Aunque estos proyectos representan posturas individuales, constituyen una amenaza política para el Gobierno, ya que un acuerdo entre ellos podría otorgar a la oposición una mayoría significativa en el Congreso. Esta situación pone de manifiesto la complejidad del panorama político actual y la necesidad de encontrar soluciones consensuadas para garantizar el funcionamiento adecuado del sistema educativo.
