En abril de 2019, el fútbol femenino argentino marcó un hito histórico con la firma de los primeros contratos profesionales para 15 jugadoras del San Lorenzo. Este evento, lejos de ser fortuito, fue el resultado de una lucha sostenida, con Macarena Sánchez como su abanderada. Dos meses antes, Sánchez había desafiado a la UAI Urquiza, exigiendo la regularización de su situación laboral.
La valiente acción de Sánchez desató una revolución que culminó en la profesionalización del fútbol femenino en Argentina. Sin embargo, su exposición no fue sin costo. Se convirtió en blanco de críticas y enfrentó presiones, agresiones y amenazas, incluso llevándola a un retiro prematuro del deporte que amaba durante dos años.
En una entrevista con Noticias Argentinas, Sánchez reflexionó sobre aquel momento histórico y los desafíos que enfrentó en su vida personal. A pesar de las dificultades, destacó el crecimiento del fútbol femenino, aunque también señaló ciertos retrocesos y obstáculos persistentes.
Sánchez también compartió sus experiencias sobre su incursión en la política y su futuro en ese ámbito, definiéndose como una fiel militante peronista en la actualidad.
A cinco años de aquel hito, Sánchez recordó el momento de la firma de su primer contrato y reflexionó sobre el impacto de su lucha en el fútbol femenino. Reconoció las responsabilidades adicionales que asumió como abanderada de la causa, así como las presiones tanto dentro como fuera de la cancha.
En cuanto al presente y futuro del fútbol femenino, Sánchez expresó su preocupación por el estancamiento y los retrocesos, instando a una mayor organización y unidad dentro del movimiento feminista para enfrentar los desafíos actuales.
En cuanto a su carrera deportiva, Sánchez reveló que ha optado por dejar el fútbol, encontrando satisfacción en su rol de ex jugadora. En el ámbito político, continúa explorando opciones, manteniéndose comprometida con sus ideales peronistas.
Finalmente, Sánchez dejó un mensaje de aliento para las jóvenes que sueñan con ser jugadoras de fútbol, instándolas a disfrutar del deporte y perseverar en sus sueños, a pesar de los desafíos que puedan enfrentar.
