Impacto del nuevo proyecto en la jubilación femenina: ¿Un retroceso en los derechos previsionales?
El proyecto consensuado en Diputados trae consigo implicaciones significativas para las mujeres, ya que contempla la subida de la edad jubilatoria de 60 a 65 años. Esto se da mediante la derogación de la ley 27.705, la cual establecía la moratoria previsional más reciente y crucial, conocida como “Unidad de Pago de Deuda Previsional”, aprobada en marzo de 2023 por un plazo inicial de 2 años, extendible por otros 2 años.
Para las mujeres con 30 años o más de aportes, o aquellas que se beneficiaban de la moratoria, la posibilidad de jubilarse a los 60 años se verá limitada por la alta tasa de informalidad laboral femenina. Con la derogación de la moratoria, solo podrán acceder a una Prestación de Retiro Proporcional a los 65 años. Esto implica un haber mínimo equivalente a la Prestación Universal al Adulto Mayor (PUAM) a los 65 años, con el 80% del haber mínimo, sin derecho a la pensión por viudez, independientemente de los años de aportes y bajo la condición de demostrar vulnerabilidad social.
El valor de la PUAM en mayo será de $152.113, más los $70.000 del bono correspondiente.
Aunque las demás moratorias se mantienen, su impacto disminuye con el tiempo, teniendo escasa relevancia para acceder a la jubilación.
Las mujeres constituyen la amplia mayoría en sectores como el Personal de Casas Particulares, así como en actividades sociales y de salud, donde la informalidad laboral alcanza entre el 50 y 75%, lo que se traduce en falta de aportes a la Seguridad Social.
El dictamen establece la creación de la Prestación de Retiro Proporcional para aquellos que alcancen los 65 años sin cumplir con el requisito de 30 años de aportes a los 60 años (para mujeres) o 65 años (para hombres), según el artículo 19 inciso c) de la ley 24.241 y sus modificaciones.
Esta nueva prestación tendrá un haber mínimo establecido por la ley 27.260, equivalente al 80% del haber mínimo de la PUAM, para aquellos que cumplan con los requisitos del artículo 13 de dicha ley (tener 65 o más años de edad).
El Poder Ejecutivo deberá reglamentar en un plazo no mayor a 30 días la Prestación de Retiro Proporcional, estableciendo los parámetros para el acceso en función de los aportes efectuados al Sistema Integrado Previsional Argentino y las condiciones de la prestación.
Según la abogada especializada en temas previsionales Andrea Falcone, la derogación de la moratoria anticipada significa que el 90% de las mujeres no podrá jubilarse a los 60 años y deberá esperar hasta los 65 años para acceder a una PUAM o una jubilación proporcional en caso de no contar con aportes suficientes.
Sin embargo, la preocupación no es exclusivamente femenina, ya que de aprobarse esta ley, 7 de cada 10 hombres tampoco podrán jubilarse a los 65 años, teniendo que optar por una pensión no contributiva o una jubilación proporcional. La alta tasa de informalidad laboral es el principal motivo por el cual se ha permitido el acceso a través de moratorias, siendo esta la respuesta estatal a la falta de control sobre el empleo informal.
LEER: Efemérides del 24 de noviembre: acontecimientos destacados de la fecha