Denuncian “hurto” de notebooks del ex Ministerio de Cultura: 254 equipos desaparecidos
El Ministerio de Capital Humano ha denunciado un presunto hurto en el ex Ministerio de Cultura de la Nación, donde desaparecieron notebooks que habían sido adquiridas en septiembre de 2023, apenas tres meses antes de que la administración de Alberto Fernández dejara el poder. Según la denuncia, el valor de compra de estas computadoras “desaparecidas” asciende a 290 millones de pesos argentinos.
En la presentación judicial, se aclara que de las 288 computadoras adquiridas, “sólo 34 estaban asignadas a agentes estatales”, mientras que “254 se desconoce el paradero”.
Se describe el hecho como un grave delito contra el erario público, realizado aparentemente durante la gestión anterior y ante la negligencia de los funcionarios encargados de la custodia.
La causa, bajo el número 1742/2024 en el Juzgado Federal N°2, detalla que se trata de equipos de marca Lenovo ThinkPad E15 Gen 4, por los cuales la administración pública habría pagado 1.030 dólares cada uno, lo que estima un perjuicio patrimonial de 181.280 dólares, equivalente a los 290 millones de pesos argentinos.
La información surge de la última licitación realizada bajo el expediente EX-2022-91393702-APN-DCYC#MC, a través del proceso de licitación Nº 83-0050-LPU22. Se registra que la recepción definitiva de los últimos 200 equipos nuevos fue el 18 de septiembre de 2023, menos de tres meses antes del cambio de gobierno. Esto lleva a la conclusión de que, según el Ministerio de Capital Humano, “las notebooks ingresaron pero tuvieron otro destino que no fue el de la repartición pública”.
El escrito judicial, firmado por la subsecretaria Legal de Capital Humano, Leila Gianni, afirma que los hechos surgieron a partir de una solicitud realizada al responsable de la Dirección de Tecnología de la Información del entonces Ministerio de Cultura, Ignacio Caamaño, para conocer el paradero de los bienes tecnológicos del área. La solicitud fue hecha el 22 de febrero y la respuesta, recibida el 27 del mismo mes, indicaba que de las 288 computadoras adquiridas, solo 34 estaban asignadas a agentes estatales y se desconocía el paradero de las 254 restantes.
Ante esta situación, se le pidió nuevamente a Caamaño que informara la localización de las computadoras faltantes, dado que su dirección, al igual que la Dirección General de Administración de la Subsecretaría de Gestión Administrativa de Cultura, tenía la obligación de llevar un control y seguimiento de esos bienes.
