Hallazgo sorprendente: un túnel secreto encontrado bajo el baño de una casa, ¿una ruta de contrabando?

Hayley Gilmartin y su esposo, Trevor, se encontraban en medio de una tarea doméstica común: retirar un antiguo jacuzzi de su residencia en las orillas del lago Hurón, cuando se toparon con un hallazgo extraordinario a seis metros de profundidad: una cámara sumergida en agua.

La cámara, conectada al lago a través de una tubería, suscitó especulaciones sobre su origen, siendo una teoría destacada la de un posible túnel clandestino de la era de la Prohibición. Esta suposición, ampliamente difundida por medios como el Daily Mail británico, sugiere que dichos túneles podrían haber servido como rutas clandestinas para el contrabando de alcohol a través de la frontera entre Estados Unidos y Canadá.

Inicialmente, el descubrimiento no fue recibido con entusiasmo por parte de Hayley y Trevor, quienes admitieron sentir cierto inquietante ante lo desconocido. “Cualquiera que encuentre un acceso subterráneo bajo su hogar en la oscuridad lo encontrará espeluznante”, comentó Hayley.

Sin embargo, tras reunir el coraje necesario para explorar el pozo, la pareja se encontró con una sorpresa aún mayor: una habitación completamente distinta al jacuzzi, conectada por un túnel submarino. “Buceamos hacia el otro extremo y descubrimos un túnel enorme”, relató Hayley, señalando que la continua entrada de agua desde el lago y los ríos cercanos hacía imposible vaciar la misteriosa habitación.

A medida que investigaban la historia de su casa y el propósito de la habitación subacuática, Hayley y Trevor se vieron envueltos en una serie de teorías, desde el transporte de salmuera durante la Segunda Guerra Mundial hasta el contrabando de alcohol durante la Prohibición. “En nuestra zona encontramos muchas botellas de esa época”, agregó Hayley.

Los vecinos también compartieron historias similares, sugiriendo que durante la Prohibición, el lago Hurón y el río St. Clair fueron utilizados como rutas clandestinas para el contrabando de alcohol. Según el historiador Douglas Bancroft, estas áreas fueron responsables del 75% de las exportaciones ilegales durante ese período.

Aunque aún tienen que retirar una puerta de madera tapiada en la habitación subacuática, Hayley y Trevor planean continuar explorando y, si es posible, transformar el espacio en una sala de juegos o incluso una pista de bolos.