Crece la tensión en el Gobierno por la caída de los mercados y la presión política opositora

La administración de Javier Milei transita uno de sus momentos más complejos desde la asunción presidencial. A la inestabilidad financiera internacional se suman las presiones internas del kirchnerismo y los gremios, que refuerzan el conflicto político.
¡Mantenete al tanto de las últimas noticias de San Nicolás y el país!. Unite a nuestro CANAL DE WHATSAPP y recibí las novedades directamente en tu teléfono. Click AQUÍ
El sábado pasado, antes de que el impacto del desplome bursátil acaparara los titulares, el presidente Javier Milei analizaba con un interlocutor el aumento generalizado de aranceles anunciado por Donald Trump. La medida encendió alarmas en todo el mundo financiero.
El video viralizado en redes sociales, donde el economista Ramiro Castiñeira argumenta en el canal Neura que “lo que está haciendo Trump es negociar de manera violenta. Obligar a todos a que se sienten en la mesa. Hoy, no dentro de un año”, deja en evidencia la mirada estratégica del oficialismo sobre el nuevo escenario geopolítico.
Según Castiñeira, las subas de aranceles no solo tienen fines comerciales sino también políticos, apuntando directamente contra China. La repercusión global del anuncio es inmediata: derrumbes bursátiles, caída en el valor de las materias primas que exporta Argentina y expectativas de inflación y devaluación en ascenso.
Argentina, con yuanes en sus reservas y una fuerte dependencia de Vaca Muerta, se enfrenta a un panorama incierto. Además, el Gobierno se encuentra en una fase crucial de su negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Desde Casa Rosada reconocen que “se vienen días difíciles”, con mayor volatilidad y deterioro en variables clave: dólar, inflación, riesgo país y nivel de actividad económica. No obstante, destacan que el país no arrastra ciertos desequilibrios estructurales del pasado, como el gasto público desbordado.
Frente a este contexto, el canciller Gerardo Werthein ya inició contactos con la administración estadounidense, logrando que Argentina se convierta en uno de los primeros países en sentarse a negociar con la Secretaría de Comercio que dirige Howard Lutnick. Milei propuso una medida audaz: llevar los aranceles a “0%” en un acuerdo inmediato.
Como presidente pro tempore del Mercosur, Milei también enfrenta un dilema regional. Mientras que el bloque mantiene un arancel común cercano al 35%, Trump impuso un 10% más moderado, lo que plantea un debate estratégico: ¿seguirá el Mercosur el rumbo argentino?
El frente interno: Congreso, CGT y oposición
Mientras el equipo económico y diplomático sortea estos desafíos, el kirchnerismo avanza con una ofensiva parlamentaria. Acompañado por la CGT y protestas en la calle, Unión por la Patria logró bloquear los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, y ahora apunta a frenar la iniciativa Ficha Limpia.
La Cámara de Diputados también se transforma en escenario de conflicto. Desde el bloque opositor buscan forzar interpelaciones por el caso $Libra y reactivar políticas previsionales como la moratoria. Todo esto podría poner en jaque el equilibrio fiscal que defiende el oficialismo.
El Gobierno enfrenta estas jugadas sin aliados sólidos. Sectores como Democracia para Siempre (Facundo Manes), Encuentro Federal (Miguel Pichetto) y la Coalición Cívica (Elisa Carrió) acompañan a la oposición en varios puntos clave.
Mientras tanto, en el Ejecutivo trabajan para recuperar la iniciativa con un nuevo decreto desburocratizador, impulsado por el ministro Federico Sturzenegger. La propuesta incluye reorganizaciones, disoluciones y fusiones dentro de la administración pública nacional.
Con la baja de la inflación en pausa, desde Balcarce 50 buscarán reforzar el ajuste bajo el símbolo de la motosierra, el emblema que Milei popularizó y que hasta Elon Musk hizo viral.
LEER: García Mansilla renunció a la Corte Suprema en medio de un fuerte conflicto institucional