Villa Constitución: Funciona un cinerario común en la Parroquia San Pablo Apóstol

Hace tiempo que la parroquia de nuestra ciudad bregaba por la concreción de ese proyecto. Así lo anunció el párroco Diego Bulfoni, quien comentó que “después de recibir la bendición, se inauguró este espacio que hace mucho tiempo se está promoviendo en las iglesias para que los restos mortales de nuestros seres queridos fallecidos, después de cremados, descansen en un lugar sagrado como es un templo. Es otra opción al cementerio, que a veces presenta inconvenientes.”

El cinerario es una fosa común de dimensiones donde se depositan las cenizas de nuestros seres queridos, a través de una abertura denominada pila. En la región, las parroquias de Arroyo Seco y el santuario de San Nicolás ya cuentan con este espacio.

“Se combina una fecha acorde para la familia -continuó Bulfoni-, se celebra la misa, nos acercamos al cinerario, elevamos una oración y luego se depositan las cenizas en donde quedan para siempre. Allí siempre van a tener una oración, algo muy importante porque para la fe la oración por los difuntos es una obra de caridad y misericordia.”

Los interesados e interesadas pueden acercarse a la Secretaría Parroquial, en primer lugar, allí se firma un convenio entre el familiar a cargo y la parroquia porque una vez que se depositan las cenizas, ya no se pueden retirar ya que es un cinerario que es común. Así se va llevando un registro de quiénes son los restos depositados en el cinerario y elevarlos siempre en oración.

En la Secretaría llenan los papeles correspondientes y deben abonar una cifra de 7 mil pesos por única vez. “En caso que no cuenten con esta suma no quiere decir que no puedan depositar las cenizas de su ser querido allí”, aclaró el Padre.

Las personas saben que se reza con frecuencia por quienes están en el cinerario, así como en cada misa y los mismos familiares pueden venir a elevar una oración cada vez que quieran.