Incremento del costo del transporte público en San Nicolás y reclamos de la comunidad

A partir de la medianoche del 1 de mayo, el costo del pasaje urbano en San Nicolás aumentó en un 20%, alcanzando los $144. Este es el tercer y último aumento del 87% aprobado por el Concejo Deliberante en diciembre pasado, y se suma a los incrementos anteriores del 20% en febrero y diciembre de 2022. El aumento también tendrá un impacto en los precios de las tarifas de diferentes rutas, así como en el precio del pasaje escolar, que a partir de mañana se situará en $33.

No obstante, los usuarios del transporte público de pasajeros en San Nicolás han manifestado sus quejas. La empresa Vercelli, responsable del servicio, utiliza unidades obsoletas que no pueden transitar por la ciudad debido a la antigüedad de sus modelos. Además, las unidades no cumplen con los requisitos de seguridad, como tener colectivos con piso bajo y aire acondicionado, lo que hace que en pleno verano sea imposible realizar los viajes cómodamente. A pesar de que la antigüedad máxima de las unidades de transporte público es de 10 años, la empresa Vercelli emplea unidades con más de 12 años.

La comunidad también ha expresado su preocupación por el hecho de que dichas unidades antiguas son adquiridas por otras empresas para transportar personas a fábricas, realizar turismo o trasladar a personas dentro del mismo municipio. Esto plantea preguntas sobre la seguridad de los pasajeros en esas otras situaciones y por qué las empresas que compran esas unidades no deben cumplir con los mismos estándares de seguridad que se exigen en el servicio de transporte público de pasajeros.

Los ciudadanos también han denunciado la falta de control por parte de los concejales, quienes aprueban los aumentos sin leer los términos de los mismos y sin tener en cuenta las preocupaciones de los usuarios.

En conclusión, resulta alarmante la situación del servicio de transporte público de pasajeros en San Nicolás, que a pesar de los constantes aumentos en el precio del pasaje, no ha logrado mejorar su calidad. La comunidad reclama por unidades obsoletas que no cumplen con las normas de seguridad y confort, y se ve obligada a soportar viajes incómodos y riesgosos.

Es inaceptable que los usuarios del transporte público deban pagar precios dolarizados por un servicio deplorable, que no cumple con los estándares básicos de calidad y seguridad que se esperan y que están regulados por contrato. Es hora de que las autoridades pertinentes intervengan y exijan a las empresas que ofrezcan un servicio de transporte público de calidad, seguro y cómodo, en beneficio de toda la comunidad.