Denuncia anónima revela abusos y privilegios durante la crisis del temporal en San Nicolás
La tragedia desatada por el reciente temporal en San Nicolás ha dejado a muchos vecinos en una situación desesperada. Recientemente, un miembro anónimo de un grupo de la red social Facebook compartió una desgarradora queja exponiendo una serie de injusticias experimentadas durante y después de lo vivido. En su mensaje, expresó su indignación por la manera en que se trataba a aquellos que buscaban ayuda en medio de la crisis. La persona detalló los obstáculos humillantes que enfrentó al solicitar suministros básicos como alimentos, artículos de limpieza y ropa.
El testimonio reveló que, en lugar de recibir asistencia sin trabas, los afectados se encontraron con una burocracia deshumanizadora, un panorama desolador, de miserias humanas a la vista y todo ello marcado por la desconfianza, la desigualdad y la manipulación por parte de ciertas personas que buscaron sacar provecho de la desgracia ajena.
Leer también: EDEN: informe de trabajos realizados y a realizar este fin de semana
La búsqueda desesperada de asistencia se convirtió en un proceso burocrático y humillante para numerosos afectados. La solicitud de artículos esenciales, tales como alimentos, productos de limpieza o ropa, se tornó desalentadora, con la sensación de que la vergüenza y la indignidad eran condiciones previas para recibir ayuda. Es importante destacar que todos estos suministros procedían de donaciones de ciudadanos que, de buena fe, se unieron en solidaridad con la causa.
Los testimonios recabados detallan cómo, para acceder a provisiones básicas como arroz o leche para los niños, las autoridades exigían un minucioso registro de datos personales, que incluía nombres, apellidos, direcciones y números de documentos. Algunos relatan que incluso se les requería presentar fotografías de los daños sufridos en sus hogares como prueba de su necesidad, sin importar si el agua había entrado o no. En un caso particularmente impactante, una madre compartió que, al acudir con su hijo en busca de alimentos, se les pidió que el niño se tomara una foto con lo recibido, a lo que ella se negó rotundamente. Ante la imposibilidad de obtener los suministros sin acceder a esta petición invasiva y humillante, la mujer se retiró sin nada.
Leer también: Temporal en San Nicolás – Santiago Passaglia: “Vamos a seguir trabajando hasta que la ciudad vuelva a la normalidad”
La desconfianza y la arbitrariedad en la distribución de la ayuda fueron moneda corriente. Se denuncia cómo ciertas personas, identificadas como vecinos de ciertos barrios, se arrogaban el control de los suministros destinados a la comunidad, seleccionando cuidadosamente quién recibiría ayuda y quién no, basándose en relaciones personales o prejuicios.
Los relatos apuntan a organizaciones nefasta en algunos puntos de distribución. Se describen escenas donde los más necesitados eran ignorados mientras que aquellos con contactos privilegiados obtenían todo lo que necesitaban e incluso más. La falta de transparencia y la discriminación en la distribución fueron evidentes, dejando en claro que el sufrimiento de los más vulnerables no era una prioridad para aquellos que se aprovechaban de la situación.
Leer también: Provincia instalará en San Nicolás una base operativa anti narcotráfico
Se mencionan casos específicos en barrios como Santa Rosa, Los Pinos, Savio, Güemes y Golf, donde se relata cómo ciertas personas, bajo la fachada de la solidaridad, manipulaban descaradamente la distribución de ayuda, favoreciendo a conocidos y reteniendo recursos que deberían haber llegado a quienes más lo necesitaban.
Las víctimas de esta tragedia claman por justicia y transparencia en la gestión de la ayuda humanitaria. A pesar de las pruebas recopiladas y los testimonios desgarradores, la sensación de abandono por parte de las autoridades locales persiste, dejando a muchos en la incertidumbre y la desesperación. Sin embargo, confían en que la verdad saldrá a la luz y aquellos responsables de la manipulación y el abuso enfrentarán las consecuencias de sus acciones.
A pesar de las desgarradoras experiencias compartidas por aquellos afectados por el desastre y las difíciles condiciones impuestas para recibir ayuda, es importante destacar que hubo personas, grupos, instituciones y asociaciones que respondieron con generosidad y solidaridad. A través de sus acciones, demostraron que en medio de la adversidad, aún existe una parte significativa de la comunidad dispuesta a ofrecer apoyo y compasión hacia los más necesitados.