El impacto de la prescripción en casos de abuso sexual: el testimonio de Juan Pedro Aleart

El periodista rosarino Juan Pedro Aleart compartió en vivo por televisión el calvario de abusos sexuales sufridos por él y sus hermanos a manos de su padre y su tío durante la infancia. Este relato desgarrador ha reabierto el debate sobre los procedimientos de denuncia y la prescripción de los delitos sexuales.

En su relato, Aleart resaltó la tremenda dificultad emocional y psicológica que implicó enfrentar esas violencias. En un momento clave, compartió que tras denunciar a su tío, la Justicia de la provincia de Santa Fe le informó que no podía hacer más nada.

“Me dijeron que todo lo que estoy contando es creíble y fundado. Pero que está prescripto, por lo tanto esta persona que abusó de mí, de mi hermano y de otras personas está libre. El Estado reconoce que todo esto pasó pero que no puede hacer nada”, reveló.

Aleart agregó: “La prescripción es el refugio de los abusadores, de ninguna manera significa inocencia. En 2015 la ley fue modificada. Los casos que surgieron después de ese año son imprescriptibles. Pero los casos de 2015 para atrás son diferentes. Háblenme de injusticia”.

La prescripción y la “Ley Piazza” han sido puntos de cambio en la legislación sobre abuso sexual en los últimos años. El Código Penal de la Nación establece que las víctimas de abuso sexual tienen hasta 12 años para iniciar un proceso judicial contra el acusado. Sin embargo, desde la sanción de la Ley Piazza en 2011, este plazo se cuenta desde que la víctima cumple 18 años.

En 2015, se aprobó la Ley 27.206, “Ley de Respeto de Tiempos de las Víctimas”, que establece un plazo que comienza a transcurrir desde que la víctima decide denunciar. Esta reforma modificó el artículo 67 del Código Penal, suspendiendo la prescripción mientras la víctima sea menor de edad y hasta que, habiendo cumplido la mayoría de edad, formule la denuncia.

El caso del conductor televisivo Jey Mammon, sobreseído por considerar su delito prescripto, y una interpretación novedosa en Córdoba, donde un abuso infantil cometido hace 20 años fue considerado no prescripto, han vuelto a poner el tema de la prescripción en los medios.

Según un informe del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), los abusos aumentan con la edad de las víctimas, con el 50,5% entre 12 y 17 años, un 16,9% en niños de 0 a 5 años y un 32,6% entre 6 y 11. En el 85% de los casos, el agresor era una persona cercana o un familiar, generalmente el padre.