Brecha de precios entre campo y góndola: análisis del IPOD de abril

Los precios de los agroalimentos se dispararon en abril, revela el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) de CAME. Cada consumidor pagó $3,5 por cada $1 que recibieron los productores, con una participación del productor del 31,4% en el precio final de venta. La mayor brecha se observó en el limón (12,3 veces), seguido por la mandarina (6,9), la naranja (6,3), la pera (5,9) y la carne de cerdo (5,6).

La frutilla fue la excepción, con una brecha de solo 1,2 veces, debido a la escasez de producción por condiciones climáticas adversas. Otros productos con brechas menores fueron la calabaza y la cebolla (1,9 veces), el tomate redondo y el pimiento (2,1 veces). Aunque la frutilla aumentó sus precios en ambos extremos de la cadena (48% en origen y 13,2% en destino), otros como la calabaza aumentaron considerablemente al productor (58,3%) pero cayeron en el consumo (-0,8%).

La situación del limón y la naranja fue diferente, con una sobreoferta que llevó a caídas de precios tanto en el origen como en la góndola. En contraste, la mandarina experimentó un aumento del precio al productor (14,1%) pero una caída en el consumo (14%). La pera no registró cambios en el precio al productor, pero aumentó en la góndola (1%). La carne de cerdo, por su parte, bajó tanto en origen (11,5%) como en destino (3%).

En resumen, mientras algunos productos como la frutilla presentaron una relación más equitativa entre el precio del productor y el del consumidor, otros como el limón experimentaron brechas significativas debido a la oferta excedente. La situación de cada producto estuvo influenciada por factores como la oferta y la demanda, así como por las condiciones climáticas.