El Gobierno intensifica las negociaciones para la confirmación de los nuevos jueces de la Corte Suprema
El Gobierno está redoblando esfuerzos para asegurar la aprobación de las candidaturas de los jueces Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para la Corte Suprema de Justicia. El bloque de Unión por la Patria es crucial en la votación, y desde la Casa Rosada buscan concretar una reunión con su líder, la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner, para asegurar el apoyo necesario.
A poco de comenzar las audiencias públicas el 21 de agosto, con la presentación de Lijo, y una semana después con la de García Mansilla, el viceministro de Justicia, Sebastián Amerio, está acelerando las negociaciones bajo la dirección del asesor presidencial, Santiago Caputo. La intención de la administración libertaria es tratar los pliegos en la Cámara de Senadores durante septiembre, por lo que establecer una comunicación directa con Fernández de Kirchner se vuelve esencial, a pesar del diálogo en curso con su círculo cercano.
Una fuente oficialista destacó la importancia de este contacto: “La señora tiene a 16 senadores. Nos gustaría poder sentarnos a conversar y ver qué van a hacer con los votos.” Aunque las conversaciones con los líderes de bloque están en sus primeras etapas, el objetivo es contactar a todos los senadores y monitorear las audiencias de cerca.
El plan del Gobierno es que ambas propuestas sean aprobadas conjuntamente, tal como lo indicó el presidente Javier Milei: “Son los dos o ninguno”. Sin embargo, a pesar de las críticas, el pliego de Lijo parece tener el respaldo necesario, mientras que el de García Mansilla enfrenta más desafíos, especialmente por la postura de Unidad Ciudadana, que aún no ha definido una línea clara de acción.
El rol de Cristina Fernández de Kirchner es fundamental en este escenario, ya que varios senadores tienen libertad de acción y aún no han recibido directrices definitivas. La solicitud de reunión con “La Jefa” ha sorprendido a su entorno, que aclara que no se ha formalizado aún ninguna petición.
La designación de Lijo también enfrenta resistencia interna dentro del bloque de La Libertad Avanza, particularmente por la vicepresidenta Victoria Villarruel y algunos senadores como Francisco Paotroni. La oposición de Mauricio Macri, quien considera que la elección de Lijo podría ser un error, también complica la situación.
A pesar de las críticas y desafíos, el Poder Ejecutivo sigue adelante con las negociaciones, buscando asegurar el apoyo necesario para la confirmación de ambos candidatos a la Corte Suprema.
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