Crece la venta online en Argentina y con ella la necesidad de una logística inversa eficiente

La Argentina está experimentando un notable incremento en las ventas online, lo que ha llevado a un paralelo aumento en la devolución de productos, conocido como “logística inversa”. Según la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), en los primeros seis meses de 2024, la facturación del comercio electrónico creció más del 248% en comparación con el mismo período de 2023.

Este aumento ha generado un auge en la logística inversa, que se define como el proceso mediante el cual un producto regresa del cliente al proveedor, incluyendo actividades como devoluciones, reacondicionamiento y reciclaje. Un informe de Kings Research destaca que el mercado de la logística inversa alcanzó los 533,18 mil millones de dólares en 2023 y se proyecta que alcanzará los 564,47 mil millones en 2024, con un crecimiento previsto que podría llevarlo a 879,78 mil millones de dólares para 2031, con una tasa compuesta anual del 6,55%.

Gabriel García, Director de Operaciones de Celsur Logística, comentó: “El auge de la logística inversa en los últimos años se debe principalmente a la creciente concienciación por parte de los consumidores por adoptar prácticas sostenibles y al constante crecimiento del ecommerce. Al aumentar las compras en línea, de acuerdo con las cifras de la CACE, también aumentan las devoluciones debido a fallas en las entregas, errores en la dirección, o simplemente inconvenientes con el producto, como talla equivocada.”

García añadió que “a nivel empresarial esta práctica resulta también muy atractiva ya que otorga una ventaja competitiva, incrementa la vida útil de los objetos y aporta grandes beneficios económicos al disminuir los costos de producción y de inventario por no estar usando materiales completamente nuevos.”

Los beneficios de la logística inversa son claros tanto para las empresas como para los consumidores. “Para las empresas, la optimización de estos procesos permite una reducción de costos, la mejora de la satisfacción del cliente y el cumplimiento de normativas ambientales. Además, permite recuperar el valor de los productos devueltos o desechados, al mismo tiempo que se minimiza el impacto ambiental. Mientras que, para los consumidores, estos procesos aseguran un servicio más eficiente y una mejor experiencia en la gestión de devoluciones y reemplazos”, sostuvo García.

A largo plazo, se anticipa que la logística inversa seguirá siendo fundamental en la transformación de la cadena de suministro global. La creciente adopción de modelos de economía circular y el cumplimiento de normativas ambientales más estrictas aumentarán su relevancia en sectores como el comercio minorista, la manufactura y la tecnología, mientras que la innovación en los procesos permitirá una gestión más eficaz de los recursos y una mayor rentabilidad para las empresas.