Estudiantes le gano a Everton en Chile, y se acerca a la fase de grupos de la Libertadores
Venció 1 a 0 a Everton con un golazo de Matías Pellegrini. La revancha se jugará el miércoles próximo en La Plata.
Estudiantes de La Plata quedó muy cerca de redondear su objetivo de colocarse en la fase de grupos de la competencia al imponerse a Everton de Chile como visitante por 1 a 0, al cabo de un aceptable encuentro disputado esta noche en el estadio “Sausalito”, en el marco del partido de ida por la última fase del Repechaje de la Copa Libertadores de América.
La revancha se disputará el miércoles venidero en el estadio “Uno Jorge Luis Hirschi” y con un empate el cuadro de Zielinski pasará de ronda. Para ese cotejo el citado entrenador no podrá contar con su goleador Leandro Díaz por acumulación de tarjetas amarillas.
Matías Pellegrini, a los 33 minutos del complemento, le dio la victoria al conjunto de la ciudad de las diagonales.
En medio de un campo de juego que no invitaba a trasladar la pelota a ras del piso, “Ruleteros” y “Pinchas” conformaron una etapa inicial atractiva.
Comenzó mejor el visitante y dominó la primera media hora. Estuvo cerca de coronar su preeminencia a los 19 minutos cuando una escapada y posterior remate de Del Prete pasó lamiendo el palo izquierdo del arquero De Paul.
En el último cuarto de hora el trámite dio un giro inesperado con un Everton que pasó de dominado a dominador aunque sin demasiada profundidad. Algunas buenas intervenciones del veterano guardavallas Andújar permitieron advertir un profundo decaimiento en el rendimiento estudiantil que hizo olvidar su buena faena liminar.
En el complemento el elenco trasandino intensificó su búsqueda pero siguió adoleciendo de la falta de peligrosidad suficiente como para comprometer seriamente a su adversario.
Cuando tanto la superioridad chilena como el conformismo “Pincharrata” por la igualdad eran inocultables, una escapada de Godoy por la punta derecha derivó en la exacta definición de Pellegrini, luego que Leandro Díaz se pasara de largo en ese menester.
Lo que sobrevino a la conquista que definió el pleito no resultó más que un desordenado ataque del dueño de casa en pos de nivelar el match ante un adversario que apeló a su viejo oficio copero para abortar los tímidos embates de la formación de Meneghini.
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