Ésta es la historia de una conjunción de casualidades, de cómo el traqueteo de un tren rumbo a Italia y una embarazada que contrajo rubeola confluyeron para que medio siglo más tarde Juan Pablo Savonitti corriera desde Ushuaia con la convicción de llegar tres años después hasta Alaska, cubriendo cerca de 25.000 kilómetros, casi unas 600 maratones. Pero la casualidad…